En el marco de la conferencia internacional "Del Mekong al océano: Conectando a la joven generación de escuelas secundarias de LabelFrancEducation en Quy Nhon", estudiantes y profesores de muchos países tuvieron la oportunidad especial de interactuar directamente con el profesor Duncan Haldane, el famoso físico británico.
El profesor Duncan Haldane, ganador del Premio Nobel de Física 2016, compartió con estudiantes y profesores de muchos países.
La charla no es sólo un encuentro intelectual sino también un lugar donde se despiertan de forma natural pero sugerente los valores fundamentales de la educación , la ciencia y la pasión por el descubrimiento.
Al principio, el profesor Haldane enfatizó el papel de los docentes en inspirar el amor por la ciencia . «La mayoría de las personas exitosas en ciencias mencionan a un maestro especial que los inspiró desde muy pequeños, probablemente en la escuela primaria», compartió.
Ese mensaje es como un estímulo para los profesores, que silenciosamente siembran las semillas del futuro con lecciones a veces muy sencillas, pero suficientes para encender en los estudiantes un espíritu dedescubrimiento persistente.
Cuando se le preguntó sobre el significado del Premio Nobel, el profesor Haldane respondió con amabilidad que lo más importante no es el título, sino el momento en que las personas descubren algo que nadie conocía. «La satisfacción proviene de sentir que acabas de tocar algo nuevo y que puedes inspirar a otros a seguir adelante».
Con ejemplos sencillos, introduce al público en el mundo cuántico, un campo al que ha dedicado toda su carrera. Conceptos como «entrelazamiento cuántico», «información cuántica» o «topología» se comprenden mejor gracias a sus vívidas explicaciones: «La razón por la que no nos desplomamos es el principio de Pauli, un principio cuántico que impide que los electrones se encuentren en el mismo estado. Eso es ciencia, no magia».
Los estudiantes hacen preguntas e interactúan con el profesor Duncan Haldane.
Relata sus inicios con una idea que se consideraba errónea y ante la que él mismo era escéptico. Pero la experimentación, dice, es donde la ciencia habla: «En la ciencia, hay que volver a la experimentación. La experimentación te dice la verdad».
El profesor Haldane llama a la era actual “la segunda revolución cuántica”, donde las ideas que antes eran filosóficas se están convirtiendo en la base de la tecnología: desde la computación cuántica, la seguridad de la información hasta los materiales sostenibles.
Más allá de la física, ha expresado su interés en la inteligencia artificial (IA), el cambio climático, las energías renovables y el papel de la educación en la adaptación a un mundo en constante cambio. Es un firme defensor de la energía nuclear como solución práctica, subrayando que «la ciencia y la tecnología no solo nos ayudan a adaptarnos, sino que también contribuyen a cambiar el mundo».
Al hablar con sus alumnos, siempre repite un consejo sencillo pero profundo: «Encuentra algo que realmente te apasione. Cuando te apasionas, nunca dejarás de aprender y llegarás muy lejos».
También enfatizó el papel de las matemáticas como fundamento esencial: «La física no es matemática, pero las matemáticas son el lenguaje para hablar de física. Y las matemáticas, en sentido amplio, son una herramienta para resolver problemas en todos los campos».
Como investigador y profesor universitario, añadió: «Intentar explicar cosas complejas de forma sencilla a veces me ayuda a resolver problemas en mi investigación». Para él, la docencia no se trata solo de compartir conocimientos, sino también de refrescar el pensamiento del profesor.
El profesor Duncan Haldane se tomó una foto de recuerdo con estudiantes y profesores.
La charla finalizó con un intercambio sin pretensiones, pero suficiente para sugerir una visión profunda de la ciencia, donde no las respuestas, sino las preguntas correctas son el comienzo del descubrimiento.
El profesor Haldane no predica una fórmula para el éxito, sino que enfatiza los fundamentos: ser curioso, valientemente escéptico y buscar con paciencia lo que realmente se desea comprender. Ese no es solo el espíritu de la ciencia, sino también lo que la educación debe preservar para formar generaciones que piensen de forma diferente y se atrevan a ir más allá. Porque la innovación, después de todo, no comienza con un sistema, sino con un alumno, con una pregunta que nadie se ha planteado jamás.
Fuente: https://doanhnghiepvn.vn/cong-nghe/chu-nhan-giai-nobel-vat-ly-2016-khoa-hoc-khong-bat-dau-tu-giai-thuong-ma-tu-dam-me/20250630094724647
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