Soldados de la 123ª Brigada de Defensa Territorial de Ucrania disparan morteros a través del río Dnieper hacia posiciones rusas en la provincia de Kherson, el 6 de noviembre (Foto: Getty).
ISW citó a dos blogueros militares rusos que dijeron que los soldados ucranianos estaban aprovechando las fuertes nevadas y los fuertes vientos, que reducían la visibilidad y debilitaban las defensas rusas, para consolidar sus posiciones en la región oriental del Dnieper.
Uno de los dos blogueros dijo que las ráfagas de viento con velocidades de casi 140 km/h impidieron a las fuerzas rusas utilizar la artillería y el reconocimiento aéreo, creando una oportunidad para el ejército ucraniano.
Sin embargo, el ISW agregó que las condiciones climáticas invernales también ayudaron a las tropas rusas a avanzar más cerca del centro de Krynky, alejando a las fuerzas ucranianas de la parte sur del pueblo.
Mientras tanto, Ucrania no puede proporcionar apoyo a la zona debido a los fuertes vientos y olas en la margen derecha del río Dnieper.
Rybar, un bloguero ruso, hizo una evaluación similar en una publicación de Telegram el 27 de noviembre. Específicamente, las unidades de la Armada ucraniana están aprovechando la visibilidad limitada causada por el clima invernal para reforzar sus defensas en el bosque cerca de Krynky.
Sin embargo, las brigadas de marines ucranianas 38 y 36 sufrieron pérdidas el 26 de noviembre mientras intentaban tomar el control del área central y sur de Krynky, justo antes de que llegara la tormenta.
Ants Kiviselg, jefe del Centro de Inteligencia de las Fuerzas de Defensa de Estonia, dijo a la emisora ERR la semana pasada que el aumento de las precipitaciones y los bajos techos de nubes limitarían las capacidades de los activos aéreos como los drones.
Los ataques ucranianos podrían obligar a Rusia a trasladar sus fuerzas terrestres desde la línea del frente al río Dnieper, según Kiviselg.
También dijo que el clima invernal cada vez más severo podría restringir el movimiento de vehículos e inundar las zanjas, convirtiendo la lucha allí en una "batalla de voluntades".
Ucrania inició su contraofensiva en junio, pero hasta el momento ha avanzado poco según lo previsto. No obstante, los marines ucranianos han logrado uno de los objetivos de la contraofensiva: cruzar el río Dniéper en el frente de Jersón y establecer bastiones allí.
Se estima que el número de tropas ucranianas que cruzan el Dniéper oscila entre unas pocas docenas y varios cientos. Si las fuerzas ucranianas logran ampliar la zona bajo su control, esta podría convertirse en un trampolín para que Kiev avance hacia la península de Crimea.
En contraste con el frente sur de Ucrania, las fuerzas rusas avanzan en el este.
El Ministerio de Defensa británico declaró el 28 de noviembre que, desde principios de octubre, las tropas rusas han avanzado hasta 2 km en el ataque a la ciudad de Avdiivka, en el Donbás. Esta es «una de las mayores victorias de Rusia desde la primavera de 2023», según el ministerio.
“Esta operación está acercando gradualmente a las fuerzas rusas a la planta química y de coque de Avdiivka, donde las fuerzas ucranianas mantienen una de sus principales posiciones defensivas”, dijo el Ministerio de Defensa del Reino Unido.
Sin embargo, Ucrania todavía controla la ruta de suministro a la ciudad en un corredor de unos 7 kilómetros de ancho entre las dos alas rusas, según el Ministerio de Defensa británico.
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