El 31 de octubre, yihadistas en Nigeria afiliados al autoproclamado Estado Islámico (EI) llevaron a cabo un ataque que mató a 17 civiles.
Bandas terroristas notorias en Nigeria amenazan la vida de las personas. (Fuente: Reuters) |
Testigos afirmaron que decenas de hombres armados del Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP) irrumpieron en la aldea aislada de Kayayya, a 150 km de Damaturu (capital del estado de Yobe). Los terroristas abrieron fuego contra los residentes que intentaban huir, matando a 17 personas e hiriendo a otras cinco.
Los militantes lanzaron el ataque después de que los aldeanos se negaran a pagarles un impuesto excesivo. Este es un fenómeno peligroso en zonas remotas de Nigeria, donde los grupos armados suelen exigir impuestos ilegales a los lugareños para ejercer control y mantener los recursos para sus operaciones.
El estado de Borno, en el noreste de Nigeria, se considera un bastión rebelde. Sin embargo, en los últimos dos años, los yihadistas han ampliado sus ataques, perpetrando masacres en aldeas, escuelas y mercados, además de secuestros masivos.
El pasado mes de abril, ISWAP mató a 11 personas en un bar y una escuela técnica en Geidam.
Desde 2009, los ataques terroristas de este grupo yihadista han matado al menos a 40.000 personas y desplazado a unos 2 millones de personas en el noreste del país.
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