Solo trajeron una motocicleta modificada, un imán y su fe en la bondad. Son miembros del club "Conectando Corazones de Vinh Phuc ".
Del dolor compartido a la acción audaz
Cada viernes y sábado por la noche, cuando la ciudad se duerme poco a poco, estas motos especiales vuelven a la carretera. Sin bocinazos ni luces intermitentes, se deslizan lentamente por las carreteras principales, donde acechan innumerables peligros. Bajo la moto, un imán gigante, instalado bajo una caja de hierro con ruedas sujeta a la parte trasera, recoge silenciosamente los afilados trozos de metal, los clavos que los malos han esparcido, acechando para causar un desastre.
Los ladrones de clavos siguen siendo un grave problema en las carreteras. Cientos de explosiones de neumáticos, pérdidas de control e incluso accidentes trágicos ocurren cada año. No solo amenazan directamente la vida de los usuarios de la vía, sino que también atormentan a cualquiera que transite por ellas. Consciente del peligro, el Sr. Dang Thai Son, vicepresidente del Club "Conectando Corazones de Vinh Phuc", ha ideado una idea audaz.
"Hay muchos accidentes de tráfico trágicos en estas rutas. A partir de ahí, se me ocurrió la idea de tener un vehículo para aspirar todos los clavos, reduciendo así los accidentes de tráfico para los usuarios de la vía. Algunos de mis hermanos y yo fundamos un club e implementamos esta actividad", compartió Son.
Todos los viernes y sábados por la noche, cuando la ciudad se va quedando dormida poco a poco, los miembros del club “Conectando Corazones de Vinh Phuc” viajan en estas motocicletas especiales para recoger silenciosamente piezas afiladas de metal.
Las palabras del Sr. Son han inspirado a muchas personas con ideas afines. El Sr. Nguyen Van Hung, otro miembro del club, encontró un profundo significado humano en esta actividad. "Sé que la actividad de extracción de clavos del club es muy significativa y humana. Mejora la seguridad vial de los vehículos. Al ver una actividad tan humana y significativa, también pedí unirme al equipo de extracción de clavos y acompañar a los hermanos en la tarea", confesó el Sr. Hung.
De hecho, la mayoría de los miembros del club son trabajadores ocupados. Durante el día, trabajan en negocios y empresas, pero aun así intentan dedicar tiempo cada viernes y sábado por la noche a esta labor tan significativa. Aunque la actividad es pequeña, tiene un gran valor humanístico, ya que juntos aportan seguridad a la comunidad.
Viajes tranquilos y resultados asombrosos
Las actividades del club no son fáciles. Cada noche, los miembros deben actuar con cuidado, atentos para garantizar su propia seguridad y la de quienes los rodean. Sin embargo, los resultados que logran son asombrosos. En promedio, en cada sesión, los miembros pueden recolectar de 4 a 5 kg de clavos y chatarra. Esta cifra puede parecer pequeña al principio, pero tras ella se han evitado innumerables accidentes y se han protegido a innumerables familias de dolorosas pérdidas.
En promedio, en cada sesión, los miembros del club “Conectando Corazones Vinh Phuc” pueden recolectar entre 4 y 5 kg de clavos y chatarra.
Los recolectores de clavos no reciben salario ni bonificaciones. Lo único que reciben a cambio es tranquilidad en cada calle y el silencioso agradecimiento de los transeúntes. Esa es la mayor motivación para continuar con su trabajo. Ser recolectores de clavos puede parecer simple, pero es una noble expresión de responsabilidad, amor y bondad en la vida cotidiana.
La amabilidad no necesita demostración
La Sra. Nguyen Van Anh, residente del barrio de Phuc Yen, provincia de Phu Tho , comentó: «Todos los viernes y sábados por la noche, veo motocicletas modificadas recorriendo las calles para recoger clavos. Las veo como héroes silenciosos, corazones bondadosos que, en silencio, mejoran nuestra vida».
El Club "Conectando Corazones Vinh Phuc" no es solo un grupo de personas que se chupan las uñas, sino también un hermoso símbolo de bondad y solidaridad para la comunidad. Han demostrado que la bondad no tiene por qué ser ostentosa; la bondad puede surgir de las acciones más pequeñas y dejar una profunda huella en el corazón de las personas.
El Club “Conectando Corazones de Vinh Phuc” no es simplemente un grupo de personas que “chupan uñas”, sino también un hermoso símbolo de bondad y solidaridad para la comunidad.
Con sus acciones significativas, traen paz a las calles de Phu Tho, embelleciendo la vida. Son verdaderos héroes, cuyas acciones hablan por sí solas.
Sus viajes nocturnos continúan incansablemente. El viaje del club para chuparse las uñas no es solo una simple limpieza de calles, sino también una poderosa afirmación de la bondad humana. Es una bondad desinteresada, una preocupación sincera por la seguridad de los desconocidos. Cada clavo recogido es un peligro eliminado, cada tramo despejado de la carretera es un poco más de tranquilidad para los usuarios.
No buscan fama ni elogios, solo quieren que los caminos sean más seguros. Y es esa sencillez y ese silencio lo que crea el poder de la bondad, inspirando a quienes los rodean. Sus actividades nos recuerdan que, en una sociedad moderna tan desafiante, la bondad y la compasión aún existen, impregnando cada rincón de la vida y pueden surgir de las acciones más pequeñas.
Ngoc Thang
Fuente: https://baophutho.vn/nhung-nguoi-hung-tham-lang-va-hanh-trinh-nhat-dinh-bao-ve-su-binh-an-cua-nhan-dan-237616.htm
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