La extremadamente rara tortuga marina Blanche nació en el centro de cultivo “Let's Get Cracking” en la playa del resort Six Senses Con Dao, donde el entorno natural se preserva, mantiene, respeta y protege completamente.
Esto se considera un milagro extraordinario del vasto mundo marino. Blanche es una tortuga Chelonia Mydas, también conocida como tortuga verde, que nació con el síndrome de hipopigmentación, una rara mutación genética que provoca una disminución de la melanina en la piel y el caparazón de Blanche (el pigmento que determina el color de la piel, el pelo y los ojos en humanos y animales).
Aunque no existen cifras exactas sobre la incidencia del leucismo en las tortugas marinas, se reconoce que las crías con el síndrome son muy raras y algunos biólogos marinos estiman que la incidencia es de uno en cientos de miles de huevos de tortuga marina eclosionados.
Incluso en las condiciones más favorables, las crías de tortuga marina se enfrentan a numerosos desafíos a medida que maduran. Tras eclosionar, deben cruzar la playa para llegar al océano, evitando cangrejos y aves, antes de continuar su camino para evitar innumerables peces y fauna marina y así evitar ser presas de ellas.
Además, uno de los mayores riesgos para las poblaciones mundiales de tortugas marinas en la actualidad es la amenaza humana, resultante de la caza furtiva, la contaminación, las actividades pesqueras y la destrucción de los hábitats naturales de las tortugas.
Blanche se enfrenta no solo a estos desafíos, sino también a las dificultades derivadas de su camuflaje natural reducido debido a la hipopigmentación, que la hace blanca y fácilmente detectable por los depredadores, especialmente en el agua. Las tortugas leucísticas suelen padecer diversas discapacidades, y en el caso de Blanche, esto incluye problemas de visión.
Como una rara y hermosa cría de tortuga marina, se espera que Blanche supere todos los desafíos para regresar al océano y vivir un viaje largo y feliz.
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