La salud hepática es vital para la salud general, ya que el hígado realiza más de 500 funciones esenciales, como la desintoxicación, el procesamiento de nutrientes y la producción de bilis para la digestión. Sin embargo, las enfermedades hepáticas están en aumento y afectan a millones de personas en todo el mundo.
La dieta puede afectar directamente al hígado. El consumo regular de alimentos grasos, procesados, con muchos químicos y en mal estado puede someterlo a una gran presión. Cuando el hígado está sobrecargado, las toxinas pueden acumularse y provocar enfermedades.
Para promover la desintoxicación hepática y la limpieza del organismo, se recomienda beber de 1,5 a 2 litros de agua al día. En particular, se debe limitar el consumo de alcohol, ya que estas bebidas son la principal causa de enfermedades hepáticas.
La comida rápida suele ser rica en grasas y carbohidratos, lo que puede provocar sobrepeso, obesidad y enfermedades metabólicas como la diabetes. Por lo tanto, para prevenir enfermedades hepáticas, conviene evitar el consumo excesivo de comida rápida.
El Dr. Joseph Salhab, gastroenterólogo de Florida, comparte una lista de verduras beneficiosas para el hígado. Respaldadas por investigaciones científicas , estas verduras pueden mejorar la función hepática y ayudar a reducir el riesgo de enfermedades hepáticas, como la enfermedad del hígado graso no alcohólico y el cáncer de hígado.
“Recomiendo estas verduras a todos mis pacientes con problemas de hígado. Me acostumbro a comerlas a lo largo de la semana”, dijo en un video .
Remolacha

El jugo de remolacha es especialmente bueno para el hígado (Ilustración: iStock).
Según el Times of India , la remolacha es un potente antioxidante para la salud hepática. Tiene efectos protectores que reducen las enzimas hepáticas.
Un metanálisis de 2023 descubrió que la suplementación con jugo de remolacha redujo significativamente los niveles de las enzimas hepáticas alanina aminotransferasa (ALT) y aspartato aminotransferasa (AST), marcadores clave del estrés hepático, en pacientes con enfermedad del hígado graso no alcohólico.
Además, el jugo de remolacha es una fuente de nitratos y antioxidantes llamados betalaínas. Estudios en animales han demostrado que el jugo de remolacha puede ayudar a reducir el daño oxidativo y la inflamación en el hígado.
Sin embargo, aunque los estudios en animales parecen prometedores, se necesita más investigación para confirmar los beneficios del jugo de remolacha para la salud del hígado en humanos.
Verduras crucíferas

Las verduras crucíferas son especialmente buenas para el hígado (Foto: NP).
Las verduras crucíferas son conocidas por su alto contenido en fibra y su sabor distintivo. También son ricas en compuestos vegetales beneficiosos. Algunos ejemplos de verduras crucíferas son el brócoli, la coliflor, las coles de Bruselas, el repollo, la col rizada, etc.
Los estudios demuestran que las verduras crucíferas contienen varios compuestos que alteran los procesos de desintoxicación y protegen al cuerpo contra compuestos dañinos.
En un estudio de 2016, los ratones alimentados con brócoli tenían menos tumores o enfermedad del hígado graso que los ratones del grupo de control.
Un ensayo aleatorizado y controlado con placebo realizado en 2015 reveló que el extracto de brotes de brócoli redujo significativamente los niveles de ALT y gamma-glutamil transpeptidasa (γ-GTP) en hombres con enfermedad del hígado graso. Esto mejoró la función hepática. La capacidad del brócoli para potenciar la actividad enzimática de desintoxicación lo convierte en un alimento básico en la dieta de pacientes con problemas hepáticos.
Aunque los estudios en humanos son limitados, las verduras crucíferas parecen ser prometedoras como alimento saludable para el hígado.
Ajo
Según Healthline , un ensayo clínico aleatorizado de 2020 descubrió que 800 mg de ajo en polvo durante 15 semanas mejoraron significativamente la acumulación de grasa y el riesgo de enfermedades asociadas en personas con enfermedad del hígado graso no alcohólico.
Un estudio de 2019 en China descubrió que consumir ajo crudo también puede reducir el riesgo de cáncer de hígado.
Cebolla
Las cebollas son ricas en compuestos azufrados y quercetina, un potente antioxidante. Sus propiedades antioxidantes ayudan a combatir el estrés oxidativo, un factor importante en el daño hepático.
Un metaanálisis de 2020 reveló que la suplementación con quercetina redujo significativamente los niveles de ALT en pacientes con enfermedad del hígado graso no alcohólico. La cebolla es un ingrediente común que se puede añadir a muchos platos. Además de dar sabor, también favorece la salud hepática.

Entre las verduras de hojas verdes, la espinaca es la más nutritiva (Foto: NP).
Espinacas
Las verduras de hoja verde son buenas para el hígado. La espinaca se ha relacionado con un menor riesgo de cáncer de hígado. Según un metaanálisis de 2019, el consumo elevado de verduras de hoja verde, como la espinaca, se asoció con una reducción del 39 % del riesgo de cáncer de hígado. Puedes añadir espinaca a ensaladas, batidos o platos cocinados para aprovechar sus propiedades protectoras contra las enfermedades hepáticas.
Fuente: https://dantri.com.vn/suc-khoe/muon-gan-khoe-manh-dung-bo-qua-5-loai-rau-nay-20250626201820587.htm
Kommentar (0)