La computadora cuántica Jiuzhang de China tarda menos de un segundo en realizar una tarea que a la supercomputadora más poderosa del mundo le llevaría casi cinco años.
La computadora cuántica Jiuzhang fue desarrollada por la Universidad de Ciencia y Tecnología de China. Foto: SCMP
Científicos chinos afirman haber alcanzado un nuevo hito en la computación cuántica: el dispositivo Jiuzhang realiza tareas comunes de inteligencia artificial (IA) 180 millones de veces más rápido que la supercomputadora más potente del mundo. Los problemas resueltos por su computadora cuántica podrían aplicarse a la minería de datos, la bioinformática, el análisis de redes y el modelado químico. El equipo publicó los resultados de su experimento en la revista Physical Review, según informó el South China Morning Post el 8 de junio.
"Nuestro trabajo nos acerca a la prueba de problemas prácticos utilizando las actuales computadoras cuánticas de escala media", dijo el líder del equipo Pan Jianwei, físico de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China.
En el estudio, el equipo de Pan utilizó Jiuzhang para resolver un problema que supondría un reto para las computadoras convencionales. La máquina empleó más de 200.000 muestras en el proceso. Por primera vez, los investigadores emplearon una computadora cuántica para implementar y acelerar dos algoritmos comunes en IA: la búsqueda aleatoria y el recocido simulado.
La supercomputadora más rápida del mundo necesita 700 segundos por muestra, o casi cinco años, para procesar la misma cantidad de muestras. Pero Jiuzhang tarda menos de un segundo. La mayor variedad de tareas otorga a las computadoras cuánticas una ventaja sobre las convencionales.
En las computadoras tradicionales, un bit es la unidad básica de información que representa 0 o 1. Los cúbits van más allá y pueden representar 0, 1 o ambos a la vez. Este es uno de los ejemplos más simples de la singularidad de la mecánica cuántica. Dado que la información básica de una computadora cuántica puede representar todas las posibilidades simultáneamente, teóricamente son mucho más rápidas y potentes que las computadoras convencionales que usamos a diario.
Sin embargo, las partículas subatómicas que constituyen el núcleo de esta tecnología son frágiles, de corta duración y propensas a errores si se exponen a la más mínima perturbación de su entorno. La mayoría de las computadoras cuánticas operan en entornos extremadamente fríos y aislados para evitar interrupciones. Jiuzhang utiliza la luz como medio físico para la computación. A diferencia de otras computadoras cuánticas, no necesita operar a temperaturas extremadamente bajas en un entorno sellado y puede operar de forma estable durante periodos más largos.
An Khang (según SCMP )
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