El embajador Nguyen Huy Hiep y los delegados cortaron el pastel para celebrar el Día Nacional de Vietnam. (Fuente: Embajada de Vietnam en Qatar) |
También existe una inquietud: ¿cómo acercar la imagen de Vietnam a un país islámico de Oriente Medio, donde las diferencias culturales son evidentes y se ubican en una región geopolítica siempre compleja? La respuesta solo se revela gradualmente, a través de cada reunión, cada evento y, sobre todo, gracias a la dedicada presencia de todo el equipo de la Embajada en Catar.
La amistad se construye con escucha y paciencia.
Catar, un país pequeño pero rico, dinámico y cada vez más influyente, posee características únicas. En un entorno así, la diplomacia no puede limitarse a reuniones formales, sino que requiere un profundo conocimiento de la cultura local e iniciativa en cada interacción, por pequeña que sea.
Recuerdo claramente los primeros días de mi mandato. En los primeros contactos con socios qataríes, solíamos optar por conversaciones francas pero amistosas, en lugar de formalidades elaboradas. Fue esta sencillez y sinceridad la que nos ayudó a generar confianza gradualmente, algo fundamental en la cultura de comunicación árabe. Las reuniones con líderes de QatarEnergy, la Autoridad de Inversiones, la Cámara de Comercio e Industria o grandes empresas qataríes dejaron la impresión de un país con una estrategia clara, una visión a largo plazo y la voluntad de ampliar la cooperación económica con socios fiables. Durante las conversaciones, la otra parte mostró especial interés en el papel de Vietnam como destino potencial en la cadena de suministro global, así como en su mercado laboral altamente cualificado y disciplinado.
Desde conectar empresas hasta acompañar a delegaciones de promoción comercial y realizar estudios de mercado, la Embajada siempre se ha esforzado por actuar como un puente flexible, creando constantemente las bases para una cooperación práctica y a largo plazo. Muchas empresas cataríes me han comentado que aprecian la profesionalidad, la flexibilidad y la ética laboral de los trabajadores vietnamitas, una ventaja importante que debemos seguir promoviendo.
El embajador de Vietnam en Qatar, Nguyen Huy Hiep. |
Difundiendo el alma vietnamita en el corazón del Golfo
Promover la cultura en Oriente Medio es un desafío, ya que los valores tradicionales vietnamitas orientales se ven fácilmente eclipsados por el distintivo color árabe. Pero cuanto más difícil es, más persistentes somos.
En el Día Nacional, dedicamos un espacio solemne para recrear el "rincón de Vietnam", con sombreros cónicos, ao dai y publicaciones que presentaban el país, la gente, el turismo y la gastronomía de Vietnam. Numerosos invitados cataríes e internacionales se detuvieron un buen rato en esta zona de exposición, haciendo preguntas interesantes y expresando su sorpresa y deleite ante la singular cultura oriental de Vietnam.
Además, la Embajada participa activamente en importantes ferias y exposiciones en Doha, organizando stands para presentar productos artesanales, bienes de consumo tradicionales y materiales promocionales sobre Vietnam. Imágenes de la bahía de Ha Long, Hoi An, la Ciudad Imperial de Hue o las terrazas del noroeste suelen atraer la atención y despertar la curiosidad de los espectadores, lo que da pie a interesantes conversaciones sobre un Vietnam hospitalario y único.
Entendemos que, en asuntos exteriores, a veces una imagen o un detalle cultural puede convertirse en un puente para promover el entendimiento y el respeto mutuos. Y son estos "pequeños rincones de Vietnam" en el corazón del Golfo los que contribuyen gradualmente a crear una imagen de Vietnam cercana, confiable y llena de vitalidad ante los amigos internacionales.
Cuando la diplomacia va de la mano con la comunidad
Uno de los valores más preciados de Catar es la comunidad vietnamita, aunque pequeña, muy unida, trabajadora y con la mirada siempre puesta en su patria. Hay obreros en obras de construcción, ingenieros de petróleo y gas e incluso pequeñas familias que emprenden negocios en el extranjero.
Siempre nos esforzamos por ser un apoyo confiable, no solo en los trámites administrativos, sino también en la vida espiritual. Durante el Tet, la Embajada abre sus puertas para celebrar la primavera, envolver banh chung, cantar canciones populares y hablar de nuestro hogar. Alguien comentó con emoción: «Este Tet, poder reunirnos con hermanos y hermanas, con la bandera nacional, es suficiente para alegrar el corazón».
Cuando los trabajadores enfrentan dificultades, no solo intervenimos a través de los canales consulares, sino que también intentamos conectar con ellos para apoyarlos en su integración y en su búsqueda de un nuevo rumbo. Quizás en estos pequeños detalles, la imagen de un funcionario de relaciones exteriores se refleja con mayor claridad.
El embajador Nguyen Huy Hiep (segundo desde la izquierda) con funcionarios, personal de la Embajada de Vietnam y familiares en la ceremonia de inauguración de la exposición Hospitality Qatar 2024. (Fuente: Embajada de Vietnam en Qatar) |
Una amistad fuerte en un mundo cambiante
El mundo actual se mueve rápidamente: desde las crisis energéticas y el cambio climático hasta la competencia geopolítica global. En este contexto, Qatar se ha consolidado como un importante mediador, tanto por su posición en el Grupo de Países Exportadores de Gas (GECF) como por su papel en el diálogo regional.
Vietnam y Qatar, aunque geográficamente distantes, comparten políticas exteriores comunes: paz, cooperación y no injerencia. Estos principios son la base no solo para mantener buenas relaciones entre nuestros gobiernos, sino también para contribuir conjuntamente a mecanismos multilaterales más amplios.
Es alentador que, recientemente, muchas empresas vietnamitas hayan comenzado a considerar a Catar como una puerta de entrada a Oriente Medio. Y, a la vez, los fondos de inversión y las empresas cataríes también muestran un interés gradual en el mercado vietnamita. Nuestra embajada sigue insistiendo en buscar oportunidades, con la convicción de que el futuro de la relación entre ambos países aún tiene mucho potencial.
Cierre, pero no el final
Una tarde, tras una larga reunión, permanecí en silencio ante la bandera vietnamita que ondeaba en el cielo de Doha, en medio del vasto desierto, donde el llamado a la oración resonaba con el viento cálido. En aquella extraña escena, la bandera roja con la estrella amarilla aún me parecía orgullosa y familiar. De repente comprendí que la simple pero persistente presencia de los diplomáticos es la mejor manera de "preservar el alma vietnamita" en tierra extranjera.
Fuente: https://baoquocte.vn/giu-hon-viet-noi-xu-nguoi-hanh-trinh-vun-dap-tinh-huu-nghi-viet-nam-qatar-323681.html
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