Este año, además de elegir entre Donald Trump y Kamala Harris para convertirse en el próximo presidente de Estados Unidos, los votantes estadounidenses también elegirán a los miembros del Congreso .
A diferencia de las elecciones presidenciales, que se celebran cada cuatro años, las elecciones al Congreso de Estados Unidos se celebran cada dos años. En cada elección, se eligen los 435 escaños de la Cámara de Representantes y un tercio de los del Senado.
En el actual Congreso de Estados Unidos, el Partido Demócrata controla el Senado, con 51 senadores (incluida una coalición de 47 demócratas y 4 independientes). En la Cámara de Representantes, los republicanos obtuvieron el control mayoritario tras las elecciones de 2022, con 220 escaños, mientras que los demócratas tienen 212 escaños y 3 vacantes.
Los votantes de Georgia emitieron sus votos en las elecciones intermedias de EE. UU. de 2022.
El 4 de noviembre, CNN citó estadísticas del sitio de análisis electoral Inside Elections que indican que en la carrera por la Cámara de Representantes de este año, el Partido Demócrata tiene la ventaja en 208 puestos, mientras que el Partido Republicano tiene 212. Con los 15 puestos restantes considerados como muy disputados, es probable que la nueva Cámara de Representantes tenga un partido mayoritario pero no creará una brecha demasiado grande en el número de senadores.
En el Senado, cada senador electo cumple un mandato de seis años. De los 34 escaños que se disputan la reelección este año, los demócratas defienden 20, mientras que los republicanos defienden 13. Se dice que la presión recae sobre los demócratas, ya que perder tan solo dos escaños tras los resultados finales daría a los republicanos la mayoría en el Senado.
Sin embargo, ante la improbable posibilidad de que el partido ganador logre una mayoría abrumadora, los observadores han mencionado una regla importante del Senado: el procedimiento de filibusterismo. Esta regla se refiere a que los senadores pueden extender el debate indefinidamente al elaborar leyes.
Se necesitan 60 senadores para finalizar el debate y proceder a la votación, lo que podría dar lugar a que la oposición utilice esta situación para prolongar y bloquear un proyecto de ley con el que no está de acuerdo. Cuando un proyecto de ley llega a votación, solo necesita una mayoría de 51 votos para aprobarse. Si la votación es 50-50, el presidente del Senado, quien también es el vicepresidente en ese momento, tiene el voto decisivo.
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Fuente: https://thanhnien.vn/cuoc-bau-cu-my-nam-2024-khong-chi-bau-tong-thong-185241104155418893.htm
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