Construyendo una sociedad segura, justa y feliz
En recientes orientaciones de desarrollo, el Secretario General To Lam enfatizó que la prosperidad no se limita solo al crecimiento económico , sino también a la capacidad de crear una sociedad segura, justa y feliz para todos, sin dejar a nadie atrás. Este mensaje es especialmente significativo para Ciudad Ho Chi Minh, una megaciudad que enfrenta una brecha entre ricos y pobres, y presiones en materia de vivienda, atención médica y educación.
Muchos países desarrollados han pagado un alto precio por descuidar la equidad social. Para Ciudad Ho Chi Minh, el objetivo de la "prosperidad inclusiva" requiere una política urbana humana: desarrollar vivienda social sostenible, expandir la sanidad y la educación públicas de alta calidad a las afueras, aumentar las zonas verdes, el bienestar público y el acceso a la cultura, el deporte y la creatividad para todos.
El Secretario General afirmó que la ciudad debe ser un lugar habitable, donde cada ciudadano reciba atención integral en términos de salud, educación, entorno vital y seguridad. El concepto de "habitable" no es un eslogan, sino un conjunto de criterios que requiere inversión sostenible y una estrategia clara. A pesar de su ajetreo, Ciudad Ho Chi Minh se enfrenta a congestión, inundaciones, contaminación atmosférica, falta de espacios verdes y estrés psicológico urbano.
Para desarrollarse según el modelo de "ciudad humana", es necesario pasar del índice económico al índice de felicidad; de priorizar los vehículos a motor al transporte público y las calles peatonales; del hormigón a la "ecociudad". Seúl (Corea del Sur) demolió la autopista Cheonggyecheon para restaurar los arroyos naturales, revitalizando así los espacios públicos y aumentando el índice de felicidad.
Ciudad Ho Chi Minh puede aprender de canales como el de Nhieu Loc-Thi Nghe, el de Lo Gom o la zona de Thu Thiem-Cat Lai. El desarrollo humano integral debe ser un objetivo firme, que vincule estrechamente el crecimiento con la equidad social y la calidad de vida. Las zonas urbanas no son solo lugares de rascacielos, sino también lugares donde decenas de millones de personas, especialmente jóvenes y trabajadores, viven, trabajan, estudian y sueñan.
La fusión de localidades es una oportunidad para conectar diversas culturas, personas y capacidad creativa. Ciudad Ho Chi Minh necesita desarrollar un ecosistema de innovación centrado en el ser humano, con una red de universidades, institutos de investigación y startups como núcleo. Ciudad Thu Duc puede convertirse en el "Silicon Valley" de Vietnam si construye un modelo educativo, de investigación y de negocios como Stanford (EE. UU.) o Tsukuba (Japón). Binh Duong también puede convertirse en el centro de innovación del Sur si conecta eficazmente la educación, la industria y las startups.
Instituciones para personas
Cuando el Secretario General To Lam enfatizó: «La prosperidad no es solo crecimiento económico, sino también la capacidad de crear una sociedad segura, justa y feliz», no solo se trataba de un mensaje político, sino también de una guía estratégica para construir un nuevo sistema de valores de desarrollo, comenzando por las instituciones. Las instituciones no son solo leyes o aparatos, sino la forma en que la sociedad se organiza y funciona.
Una metrópolis en expansión de más de 20 millones de habitantes no puede desarrollarse con la mentalidad tradicional. Ciudad Ho Chi Minh necesita una institución regional moderna, multicéntrica y digitalmente integrada, donde el gobierno sea flexible, transparente y creativo en su gobernanza. Sin embargo, dicha institución debe tener identidad propia.
No hay ciudad habitable sin sus recuerdos, cultura y alma urbana. La diversidad de Ciudad Ho Chi Minh, Binh Duong y Ba Ria - Vung Tau es un activo valioso: desde la riqueza histórica de Saigón - Gia Dinh, la vitalidad industrial de Binh Duong hasta el patrimonio portuario de Vung Tau. Con una promoción adecuada, cada región puede convertirse en un polo de desarrollo único en términos de economía, turismo, creatividad y calidad de vida.
El mundo ha demostrado que las instituciones modernas y la cultura autóctona pueden ir de la mano. Copenhague (Dinamarca) se ha convertido en una ciudad verde de alta tecnología sin perder su identidad. Kioto (Japón) ha preservado su patrimonio milenario en medio de la ola de globalización. Ciudad Ho Chi Minh puede hacer lo mismo si se desarrolla para la gente, toma la cultura como base e innova sus instituciones para difundir los valores vietnamitas.
Con la histórica decisión de fusionarse y una dirección clara del Gobierno Central, Ciudad Ho Chi Minh inicia una nueva etapa: no solo se expande geográficamente, sino que también eleva su visión de desarrollo. De centro económico a ciudad habitable; de crecimiento puro a desarrollo inclusivo; de gestión administrativa a creación de felicidad. Si se mantiene esta visión, Ciudad Ho Chi Minh no solo será la ciudad más grande del país, sino también un símbolo de desarrollo integral y una rica identidad en la nueva era.
Fuente: https://www.sggp.org.vn/tu-tang-truong-kinh-te-den-phon-vinh-toan-dien-post801304.html
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