Los sensores de huellas dactilares se utilizan ampliamente en la actualidad, lo que contribuye a facilitar las operaciones en las tareas diarias.
Los sensores de huellas dactilares, que antes eran una tecnología de seguridad costosa, ahora se encuentran en muchos dispositivos comunes. Su creciente presencia no solo está cambiando la forma en que desbloqueamos nuestros dispositivos, sino también nuestros hábitos digitales diarios.
Sensores de huellas dactilares: De la tecnología de seguridad a los hábitos digitales
Anteriormente, los sensores de huellas dactilares se consideraban tecnología de punta, a menudo solo presentes en el sector de la seguridad o en dispositivos electrónicos caros. El verdadero punto de inflexión llegó en 2013, cuando Apple introdujo Touch ID en el iPhone. Desde el momento en que los usuarios tocaban sus dedos para desbloquear sus dispositivos, la tecnología biométrica comenzó a adoptarse de forma generalizada.
En pocos años, los sensores de huellas dactilares han aparecido en todas partes: teléfonos, ordenadores portátiles, relojes para fichar, cerraduras de puertas, cajas fuertes, tarjetas bancarias e incluso automóviles.
Según una estadística de Mordor Intelligence de 2024, la tecnología de huellas dactilares representa casi el 60 % de las soluciones de identificación biométrica integradas en dispositivos electrónicos de consumo, como teléfonos, ordenadores y electrodomésticos inteligentes. Esto demuestra que las huellas dactilares se han convertido en una opción habitual para los usuarios en la vida digital actual.
Además, la tecnología de sensores se actualiza constantemente para adaptarse a diversos segmentos de dispositivos. Desde las líneas telefónicas más populares hasta los modelos de alta gama, las huellas dactilares están presentes en muchos lugares, como el botón de encendido, la parte trasera o debajo de la pantalla con tecnología ultrasónica.
De hecho, desbloquear un dispositivo ahora toma menos de un segundo, lo cual es mucho más rápido y cómodo que ingresar una contraseña manualmente. Con dispositivos como cerraduras o cajas fuertes, los usuarios no necesitan llevar llaves ni recordar códigos; basta con un toque.
Difundirse en la vida y los servicios digitales
Desde el desbloqueo de dispositivos, la tecnología de huellas dactilares se está convirtiendo en parte de nuestra rutina digital. Hoy en día, las personas usan las huellas dactilares para acceder a servicios, autenticar acciones e incluso reemplazar contraseñas en muchas situaciones cotidianas.
Cabe destacar que las huellas dactilares se están convirtiendo en una capa de autenticación popular en servicios digitales como bancos, monederos electrónicos o plataformas de hogares inteligentes. Los usuarios no necesitan accesorios adicionales ni costos adicionales; basta con un dispositivo con sensor para confirmar transacciones, desbloquear aplicaciones o acceder a cuentas de forma más rápida y segura.
En Vietnam, bancos como Vietcombank, MBBank y Techcombank han integrado la autenticación por huella dactilar en sus aplicaciones móviles. Con un solo toque, los usuarios pueden iniciar sesión, consultar cuentas o realizar transferencias sin necesidad de introducir contraseñas ni códigos OTP.
En muchos casos, esto no es solo opcional, sino un requisito para desbloquear funciones avanzadas.
La tecnología es conveniente pero no puede ser subjetiva
Si bien la tecnología de huellas dactilares ofrece una experiencia fluida, puede ser riesgosa si no se comprende y se utiliza correctamente. Las huellas dactilares son únicas, pero no se pueden modificar si se ven comprometidas. Y no es imposible clonar huellas dactilares.
En 2014, el grupo de hackers Chaos Computer Club logró recrear las huellas dactilares de un político alemán a partir de la foto de una mano publicada en línea. Los expertos de Kaspersky también advirtieron del riesgo de falsificación si el dispositivo no cifra los datos correctamente.
Para servicios críticos como la banca o el almacenamiento de datos personales, los expertos en seguridad siempre recomiendan usar huellas dactilares como una capa adicional de autenticación, no la única. Combinarlas con un PIN, una contraseña o la autenticación de dos factores sigue siendo una opción más segura en un entorno digital de alto riesgo.
La tecnología es cada vez más popular, pero para aprovecharla eficazmente, los usuarios también deben comprender sus limitaciones y cómo usarla de forma segura. Las huellas dactilares pueden ser la clave de la era digital, pero solo si se usan en el momento oportuno, de la forma correcta y con conciencia de seguridad.
Fuente: https://tuoitre.vn/cam-bien-van-tay-va-cuoc-song-so-mot-cham-nhieu-doi-thay-20250630170152773.htm
Kommentar (0)