Otro hito para el C919
Considerado como la respuesta de Pekín al Boeing 737 de EE.UU. y al Airbus A320 de Europa, el C919, producido por la Corporación de Aviones Comerciales de China (COMAC), tiene como objetivo satisfacer el floreciente mercado de la aviación doméstica china y conquistar el prometedor mercado asiático.
El pasado mayo, el C919 realizó su primer vuelo comercial, cuando el vuelo MU9191 de China Eastern Airlines despegó de Shanghái y aterrizó en Pekín. Posteriormente, en diciembre pasado, el C919 también realizó su primer vuelo comercial fuera de China continental, con destino a Hong Kong (China).
Un C919 de COMAC realiza un vuelo de demostración antes del Salón Aeronáutico de Singapur el 18 de febrero de 2024 - Foto: Reuters
Y ahora, el mayor salón aeronáutico de Asia, celebrado en Singapur, marcará un nuevo hito: el primer vuelo del C919 fuera de China. COMAC es uno de los dos fabricantes de aviones comerciales que presentarán sus aeronaves frente a la costa de Singapur en una presentación previa del salón aeronáutico el domingo (el otro es Airbus).
COMAC cuenta con dos productos de pasajeros: el avión regional ARJ21 y el avión de pasajeros de fuselaje estrecho C919, un bimotor de mayor tamaño y con capacidad para 158-192 plazas. Se espera que el C919 compita con los modelos Airbus A320neo y Boeing 737 MAX 8, que actualmente dominan el segmento de aviones de fuselaje estrecho en particular y el mercado mundial de la aviación civil en general.
Luchando por el reconocimiento
Traer el C919 a Singapur es el último esfuerzo de China para elevar el perfil del C919 y del COMAC a nivel internacional.
Mientras Airbus y Boeing luchan por aumentar la producción para satisfacer la demanda de nuevos aviones, y Boeing lidia con una serie de crisis, la industria de la aviación está esperando a ver cómo COMAC se posiciona como una alternativa viable.
COMAC invertirá decenas de miles de millones de yuanes durante los próximos tres a cinco años para ampliar la capacidad de producción del C919. La autoridad de aviación china afirmó que este año trabajará para obtener la certificación de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) para el C919, un proceso que comenzó en 2018.
Muchos expertos de la industria han advertido que el hecho de que sólo cuatro C919 estén operando en China, que el avión sólo esté certificado por reguladores nacionales y que la producción dependa de cadenas de suministro internacionales son enormes desafíos para COMAC.
Sin embargo, la escasez de suministro en toda la industria está dando a COMAC un impulso y esperanza. "También observamos una creciente tendencia entre los clientes a incluir la opción C919 en sus evaluaciones de flota", afirmó Adam Cowburn, director de la consultora de aviación Alton.
Se entregaron dos C919 en 2023 y la consultora de aviación IBA pronostica que podrían entregarse entre siete y diez C919 en 2024.
El C919 sólo ha sido certificado por las autoridades de aviación chinas y está trabajando para buscar licencias de agencias internacionales - Foto: Airways Magazine
“Con los modelos de fuselaje estrecho A320neo y 737 MAX de Airbus y Boeing agotados durante la mayor parte de esta década, el C919 tiene una gran oportunidad de ganar participación de mercado, especialmente en el mercado doméstico”, dijo Mike Yeomans, analista de IBA.
“Los desafíos inmediatos para COMAC giran en torno a la producción para satisfacer la demanda local y la certificación para ingresar a los mercados internacionales”, agregó.
La ambición de la “ diplomacia aérea”
Si logra conquistar a los clientes extranjeros, el C919 podría convertirse en una carta de triunfo de la política exterior china, tal como el Douglas DC-3 dejó su huella en la diplomacia aérea del expresidente estadounidense Franklin Roosevelt.
Con dos motores de hélice, el DC-3 tenía un largo alcance y asientos que se consideraban los más cómodos en ese momento, lo que le permitía operar vuelos de pasajeros sin tener que depender de la carga y el correo para mantener la rentabilidad.
El presidente Roosevelt utilizó activamente el DC-3 como una herramienta valiosa para fortalecer las relaciones exteriores de Estados Unidos. A través de estas aeronaves, introdujo la tecnología aeronáutica estadounidense y también entregó DC-3 a países estratégicamente importantes, en particular al rey Abdul Aziz de Arabia Saudita en 1945.
Tan solo seis años después, en 1951, Estados Unidos y Arabia Saudita firmaron el Acuerdo de Asistencia para la Defensa Mutua, consolidando así la estrecha relación entre ambos países. El DC-3 también marcó el nacimiento de Saudia, la aerolínea nacional de Arabia Saudita.
Ahora, el C919 tiene un potencial similar para China. Simbolizará el avance de China en la aviación internacional y sus capacidades tecnológicas, y puede ayudar a Pekín a fortalecer sus relaciones diplomáticas y promover su influencia global, de la misma manera que el DC-3 contribuyó a la política exterior estadounidense.
Según analistas del mercado de la aviación, aunque no puede competir directamente con el dúo Boeing-Airbus, los aviones de COMAC pueden conquistar los mercados de Irán, Rusia y Corea del Norte, países sometidos a embargos occidentales. El C919 también puede penetrar en mercados emergentes como Indonesia, Kenia o Etiopía.
Pero antes de poder alcanzar esos objetivos, el C919 necesita abordar cuestiones de seguridad y confiabilidad para obtener la certificación de las agencias de seguridad de la aviación mundial, demostrar un rendimiento operativo y garantizar un precio más competitivo que el A320neo o el 737 MAX.
Quang Anh
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