Una zona del campo de refugiados de Maghazi fue alcanzada por un ataque aéreo israelí.
The Guardian informó el 27 de diciembre que el ejército israelí ha ampliado su campaña terrestre contra los abarrotados campos de refugiados en el centro de la Franja de Gaza.
Los residentes de Gaza dijeron que experimentaron una noche de ataques aéreos y bombardeos en los campos de refugiados de Nuseirat, Maghazi y Bureij.
Los campamentos albergan a muchas familias palestinas que se refugiaron durante la guerra de 1948, así como a aquellas que huyeron del norte de Gaza durante las primeras etapas de la ofensiva terrestre de Israel en octubre.
"Hemos ampliado los combates a una zona denominada campamentos centrales. Seguiremos ajustando nuestras operaciones, métodos y composición de fuerzas según las necesidades operativas", declaró el portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari.
Israel acusa a Hamás de esconderse en lugares concurridos, como hospitales y campos de refugiados, y de utilizar a civiles como escudos humanos, una acusación que Hamás niega.
Sean Casey, coordinador del equipo médico de emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijo que más de 100 personas fueron trasladadas al hospital Al-Aqsa en sólo 30 minutos el 25 de diciembre, junto con unos 100 cadáveres.
Todos los heridos necesitan atención urgente. Un funcionario de la ONU afirmó que había un número indeterminado de víctimas atrapadas bajo los escombros tras el ataque israelí.
La agencia de noticias AFP informó el 27 de diciembre que el Ministerio de Asuntos Exteriores francés expresó su profunda preocupación tras el anuncio israelí de que intensificaría y prolongaría la guerra contra las fuerzas de Hamás en Gaza. El Ministerio de Asuntos Exteriores francés continuó pidiendo un alto el fuego, al tiempo que condenaba los bombardeos que han causado numerosas víctimas civiles en los últimos días.
En otro orden de cosas, fuentes sanitarias de Gaza dijeron que Israel ha devuelto los cuerpos de 80 palestinos muertos en Gaza, después de enviarlos a Israel para su inspección y asegurarse de que no había rehenes entre ellos.
Los cuerpos fueron devueltos a Hamás para un entierro colectivo en Gaza. Unos 250 rehenes fueron llevados a Gaza tras el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre, que causó la muerte de unas 1200 personas. Se estima que 129 rehenes siguen retenidos en Gaza. Los ataques de represalia de Israel han causado la muerte de más de 20 900 personas y herido a unas 55 000.
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