El buque de guerra estadounidense Lewis B. Puller fue recientemente atacado por los hutíes (Foto: Marina de EE. UU.).
En una declaración publicada por Al-Massirah TV el 31 de enero, un portavoz de las fuerzas armadas Houthi dijo que la fuerza planeaba continuar atacando buques de guerra estadounidenses y británicos en el Mar Rojo en defensa propia.
El comunicado agregó que las fuerzas hutíes lanzaron misiles contra el buque de guerra estadounidense USS Gravely el 30 de enero.
El 30 de enero por la tarde, el Comando Central de Estados Unidos anunció que había derribado un misil de crucero antibuque lanzado desde Yemen hacia el Mar Rojo, pero no anunció daños.
Anteriormente, el portavoz hutí Yahya Sarea anunció que el grupo armado lanzó un ataque con misiles contra el buque de la Armada estadounidense USS Lewis B Puller en el Golfo de Adén el 28 de enero.
Los hutíes afirmaron que el ataque se llevó a cabo “en apoyo del pueblo palestino oprimido”.
Recientemente, las fuerzas hutíes en Yemen han atacado repetidamente barcos en el Mar Rojo, especialmente aquellos con destino a Israel.
Los hutíes dijeron que los ataques tenían como objetivo presionar a Israel para que detuviera su campaña militar en la Franja de Gaza, una medida que llevó a Estados Unidos y el Reino Unido a lanzar ataques aéreos de represalia contra objetivos hutíes en Yemen.
Mientras tanto, en los últimos meses Estados Unidos ha atacado objetivos en Irak, Siria y Yemen en respuesta a ataques contra las fuerzas estadounidenses.
Los ataques de ida y vuelta han suscitado temores de que pueda estallar un conflicto en todo Medio Oriente, convirtiendo la región en un "barril de pólvora" que podría explotar sin control.
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